Se presentará un proyecto para evitar la suba de las dietas.
La presidente del Senado, Victoria Villarruel, y el titular de Diputados, Martín Menem, autorizaron un aumento del 30% en las dietas de los legisladores de ambas Cámaras, lo que provocó un gran rechazo en las redes sociales, al contradecir el discurso de austeridad del Gobierno. Lo que sucede, es que desde 2011, los aumentos para los funcionarios del Congreso están atados a las subas del salario de los empleados del Parlamento.
Tras el aumento, el sueldo de los legisladores llegará a los 2,5 millones de pesos por mes, una cifra altísima si se tiene en cuenta la crisis económica que atraviesa el país. Además, a ese monto hay que sumarle el “plus por desarraigo”, para que aquellos legisladores que no representan a la Ciudad de Buenos Aires puedean trasladarse.
Javier Milei fue quien decidió dar marcha atrás con la medida. El diputado libertario, Carlos D”Alessandro, comunicó que presentarán un proyecto para retroceder con los aumentos. Esto puede ser otra forma del oficialismo de querer dejar al descubierto a aquellos legisladores que voten a favor del aumento y a quienes voten en contra.
El diputado de Hacemos Coalición Federal, Miguel Ángel Pichetto, al ser consultado sobre el tema justificó la medida y aseguró: “¿Querés que la Argentina sea Uganda?”. Al legislador le pareció “razonable” el incremento “en término de la responsabilidad pública institucional”.
“¿Sabés qué sería bueno en la Argentina, que te preocuparas mucho para ver cuánto gana un gerente de la AFIP, un gerente del Banco Nación, un director, cuánto gana un juez de primera instancia, cuánto gana un camarista?”, argumentó el diputado, aunque no quiso detallar los sueldos de esos funcionarios.